1. Preparar la Base de Galletas: Un Fundamento Crujiente y Chocolatoso

1. Precalentar el horno: Precalienta el horno a 160°C (325°F).
2. Triturar las galletas: Si no usas migas de galleta ya preparadas, tritura las galletas de chocolate hasta obtener migas finas. Puedes usar un procesador de alimentos o colocar las galletas en una bolsa de plástico resistente y aplastarlas con un rodillo.
3. Mezclar con la mantequilla: En un bol mediano, mezcla las migas de galleta con la mantequilla derretida hasta que estén bien humedecidas.
4. Presionar en el molde: Presiona firmemente la mezcla de migas de galleta en el fondo de un molde desmontable de 23 cm (9 pulgadas), formando una capa uniforme.
5. Hornear (opcional): Para una base más crujiente, puedes hornear la base durante 10 minutos en el horno precalentado. Déjala enfriar un poco antes de añadir el relleno.

2. Preparar el Relleno de Tarta de Queso: Cremoso, Suave y con un Toque de Chocolate

1. Batir el queso crema: En un bol grande, bate el queso crema ablandado con una batidora eléctrica a velocidad media hasta que esté suave y cremoso, sin grumos.
2. Añadir el azúcar: Incorpora gradualmente el azúcar granulada y sigue batiendo hasta que se integre por completo y la mezcla esté ligera y esponjosa.
3. Agregar la crema agria y la vainilla: Añade la crema agria y el extracto de vainilla a la mezcla de queso crema y azúcar. Bate a velocidad baja hasta que se combinen.
4. Incorporar los huevos: Agrega los huevos uno a uno, batiendo a velocidad baja después de cada adición, solo hasta que se incorporen. No batas en exceso, ya que esto puede hacer que la tarta de queso se agriete durante el horneado.
5. Añadir el chocolate derretido: Vierte el chocolate semidulce derretido y ligeramente enfriado en la mezcla de queso crema. Bate a velocidad baja hasta que se incorpore de manera uniforme, creando un relleno de queso con un color chocolate homogéneo.

3. Hornear la Tarta de Queso: Paciencia para una Cocción Perfecta

1. Verter el relleno: Vierte el relleno de tarta de queso sobre la base de galletas preparada en el molde desmontable. Alisa la superficie con una espátula.
2. Hornear: Hornea en el horno precalentado durante 50-60 minutos.
   • Consejo: La tarta de queso estará lista cuando los bordes estén firmes y el centro esté ligeramente tembloroso (como un flan).
3. Enfriar gradualmente: Apaga el horno y deja la tarta de queso dentro con la puerta entreabierta durante aproximadamente 1 hora. Este enfriamiento gradual ayuda a prevenir que la superficie se agriete.
4. Enfriar a temperatura ambiente: Retira la tarta de queso del horno y déjala enfriar completamente a temperatura ambiente sobre una rejilla.

4. Añadir la Cobertura de Cereza: Un Toque Frutal y Vibrante

1. Cubrir con el relleno de cereza: Una vez que la tarta de queso esté fría, cubre la superficie con el relleno de pastel de cereza, extendiéndolo de manera uniforme.

5. Preparar la Crema Batida (Opcional): Un Toque Final de Suavidad

1. Batir la crema: En un bol frío, bate la crema espesa (heavy cream) con una batidora eléctrica a velocidad alta hasta que empiece a espesar.
2. Añadir azúcar y vainilla: Agrega el azúcar en polvo y el extracto de vainilla a la crema batida.
3. Montar a punto de nieve: Continúa batiendo hasta que la crema forme picos firmes.

6. Decorar y Refrigerar: El Toque Final

1. Decorar con crema batida (opcional): Si lo deseas, decora la tarta de queso con la crema batida, usando una manga pastelera o simplemente extendiéndola con una espátula.
2. Refrigerar: Cubre la tarta de queso con film transparente y refrigérala durante al menos 4 horas, o mejor aún, durante toda la noche. Esto permitirá que los sabores se asienten y que la tarta adquiera la consistencia perfecta.
3. Opcional: Decora con cerezas frescas o virutas de chocolate.

7. Servir y Disfrutar: El Momento de la Degustación

1. Desmoldar: Con cuidado, retira el aro exterior del molde desmontable.
2. Cortar y servir: Corta la Tarta de Queso Bosque Negro en porciones y sírvela fría.