Vamos a platicar de la harina de avena—es mi base esponjosa que hace esta rosca tan especial. La mezclo y amo cómo promete esa textura suave—me encanta porque es sana y rústica. ¡Es mi cimiento favorito! La leche tibia es mi calidez líquida—la vierto y amo cómo activa la levadura. Me gusta porque es tierna—es mi apoyo cálido. El azúcar es mi dulzura fiel—lo añado y amo cómo endulza sin exceso. Me encanta porque es pura—es mi chispa dulce. Los huevos son mis compinches esponjosos—los bato y amo cómo dan vida a la masa. Me gustan porque levantan—son mis pequeños héroes. El aceite neutro es mi suavidad fluida—lo echo y amo cómo hace la masa manejable. Me encanta porque es ligero—es mi toque dorado. La levadura fresca es mi magia leudante—la disuelvo y amo cómo hace crecer todo. Me gusta porque es poderosa—es mi aliada viva. La esencia de vainilla es mi calidez en gotas—la añado y amo cómo perfuma todo. Me encanta porque es acogedora—es mi detalle estrella. La crema de chocolate casera es mi riqueza cremosa—la unto y amo cómo llena de sabor. Me gusta porque es indulgente—es mi alma dulce. Las almendras son mi crujiente terroso—las pico y amo cómo dan textura. Me encantan porque son ricas—son mis joyas crujientes. El huevo batido es mi brillo final—lo pinto y amo cómo dora la rosca. Me gusta porque es elegante—es mi toque dorado.
Equipo Esencial
Mi horno es mi compa inseparable—lo pongo a 180°C y siento que la magia está por empezar. No necesito uno fancy, solo que dore bien mi rosca. Es donde todo cobra vida. Una placa es mi aliado para formar—la preparo y me emociono al verla lista. La quiero firme para esa rosca perfecta—es mi base feliz. Un bol grande es mi nido para la mezcla—amaso todo ahí y me divierto como niña. Lo quiero espacioso para que quepa mi entusiasmo—es mi hogar de sabores. Una espátula o mis manos son mi herramienta estrella—mezclo con amor, sintiendo cada ingrediente. No hay nada como amasar con ganas—es mi toque personal.
Lista de Ingredientes con Medidas
Aquí está todo lo que uso, medido con cariño:
- Para la rosca:
- 500 g de harina de avena (5 tazas)
- 200 ml de leche tibia (¾ taza + 2 cucharadas, puedes usar leche vegetal)
- 150 g de azúcar (¾ taza)
- 3 huevos
- 100 ml de aceite neutro (½ taza, como aceite de girasol o canola)
- 25 g de levadura fresca (o 10 g de levadura seca)
- Esencia de vainilla (1-2 cucharaditas, al gusto)
- Para el relleno y decoración:
- Crema de chocolate casera (al gusto, aproximadamente 200 g)
- Almendras picadas y enteras (al gusto, aproximadamente 50 g)
- 1 huevo batido (para pintar)
Pongo todo en mi mesa y siento que estoy por armar algo increíble. Con esto salen 8-10 porciones—perfectas para compartir o devorar sola si me pongo golosa. Es mi lista de oro para una rosca sana y rica. Siempre reviso que tenga todo antes de arrancar—mi truco para no correr a última hora. ¿Qué peor que darte cuenta que te falta levadura a medio camino? Así me mantengo relajada y lista.
Instrucciones Paso a Paso
Paso 1: Prepara el Fermento
¡Empecemos con magia!—en un bol pequeño, disuelve 25 g de levadura fresca en 50 ml de leche tibia (de los 200 ml) con 1 cucharada de azúcar (de los 150 g) (me encanta ese burbujeo!). Tapa con film plástico—deja reposar 10 minutos en un lugar cálido ‘til que espume (mi cocina huele a levadura y me hace saltar!). Si usas 10 g de levadura seca, espera al siguiente paso—es como despertar la vida (mi corazón late con ilusión!).
Paso 2: Mezcla los Secos y Húmedos
En un bol grande, vierte 500 g de harina de avena—haz un hueco (me emociono con esa montaña!). Añade 3 huevos, 150 g de azúcar menos la cucharada, 1-2 cucharaditas de esencia de vainilla, 100 ml de aceite neutro, el resto de la leche tibia (150 ml) y el fermento espumoso (mi cocina huele a vainilla y me hace soñar!). Mezcla con una espátula o las manos—es como crear una masa viva (mi corazón late con cada revuelo!). Es el alma esponjosa—pura base saludable.
Paso 3: Amasa la Masa
Pasa la masa a una superficie enharinada con avena—amasa 5-7 minutos ‘til que sea suave y elástica (me encanta esa textura pegajosa!). Coloca en un bol—tapa con un paño y deja levar 1-1.5 horas en un lugar cálido ‘til que doble (mi paciencia crece!). Es como darle un abrazo—pura magia leudante.
Paso 4: Forma la Rosca
Desgasifica la masa—divide en 2 tiras largas (me siento pro trenzando!). Trenza y une los extremos—coloca en una placa enmantecada con un aro en el centro (mi corazón late con cada giro!). Es la parte divertida—pura artesanía casera.
Paso 5: Deja Levar
Cubre con un paño—deja levar 30-45 minutos ‘til que casi doble (me emociono con ese crecimiento!). Es como esperar un regalo—pura textura esponjosa.
Paso 6: Hornea la Rosca
Precalienta el horno a 180°C (350°F)—pinta con 1 huevo batido (me encanta ese brillo!). Hornea 30-35 minutos—pincha con un palillo ‘til que salga limpio (mi cocina huele a Pascua!). Cubre con aluminio si dora rápido—enfría en la placa (te juro que vas a suspirar como yo la primera vez!). Es pura delicia cocida—lista para brillar (yo miro ansiosa por la ventanita!).
Paso 7: Rellena, Decora y Sirve
Corta por la mitad—rellena con 200 g de crema de chocolate casera (me emociono con esa capa!). Extiende más crema encima—decora con 50 g de almendras (mi cocina es una fiesta!). Corta en 8-10 porciones—sirve con café, té o mate (en mi casa no dura mucho!). Disfruta a temperatura ambiente—pura felicidad casera (mi mesa está lista!). Es saludable e indulgente—un festejo en cada bocado.
Solución de Problemas
Si no leva, la leche estaba fría—la próxima la tibio bien y vigilo. Es un bajón cuando no crece, pero sabe rico igual—nadie nota mi error. A veces se seca—ay, qué lío—y me doy cuenta que amasé poco. La próxima amaso más—queda esponjosa igual. Si no dora, olvidé pintar—uso huevo la próxima. Aprendo con cada rosca, y siempre es un éxito—es parte del juego. Cuando no cruje, olvidé almendras—pico más la próxima. Todo se arregla con amor y práctica.
Consejos y Variaciones
Me encanta añadir ralladura de naranja a la masa—le da un frescor que me hace suspirar. Es sutil, pero todos dicen “¿qué tiene de especial?”—pruébalo si te animas. A veces uso crema de avellanas—ese sabor diferente me vuelve loca. Se ve igual y sabe increíble—es mi giro personal. Si quiero más aroma, echo canela—el perfume es una locura. Me siento creativa y queda divino—es mi toque atrevido. Para un extra crujiente, aumento las almendras—queda como un sueño. Me hace sentir pro y luce precioso—es mi truco favorito.
Sugerencias de Servicio y Maridaje
Sirvo esta rosca con un mate calentito—el dulce y el amargo se quieren tanto que me derrito. Es mi ritual para una mañana tranquila—me encanta esa dupla. La pongo con un café con leche cuando quiero darme un gustazo total—el café y el chocolate son para morirse de ricos. Mi placer de tarde—todos piden más. La llevo a reuniones en un plato con un pañito—se ve tan festiva que todos me halagan. Me siento la reina mientras la comen y me piden la receta—es mi as bajo la manga. La guardo en un táper y me sirvo un pedacito a medianoche con un té—mi momento secreto. Es como un abrazo cuando nadie mira—no hay nada que lo supere.
Información Nutricional
Esta rosca tiene grasa del aceite y chocolate, pero me da energía y felicidad pura. Es ligera sin manteca, y no me preocupo demasiado—cada bocado es un subidón. Los huevos traen proteína—me siento un poquito menos culpable. Es sana sin harina blanca, con su lado bueno escondido—me digo que es equilibrio a mi estilo. La avena y las almendras son nutritivas y cálidas, y no cuento calorías—es un placer, no un examen. El chocolate le da un toque que amo, así que me siento menos traviesa—la como despacito y la disfruto al máximo. No tengo números exactos, pero sé que me nutre el alma más que nada—tienen calorías, claro, pero valen cada una por la alegría que traen. La como y me siento viva, eso es lo que cuenta.
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Rosca de Pascua sin Manteca con Avena, Almendras y Chocolate: ¡Saludable, Esponjosa y un Festín de Sabor en Cada Rebanada!
Description
Prepara esta Rosca de Pascua sin Manteca con Avena, Almendras y Chocolate: saludable, esponjosa y fácil con crema de chocolate. ¡Perfecta para celebraciones!
Ingredients
Aquí está todo lo que uso, medido con cariño:
- Para la rosca:
- 500 g de harina de avena (5 tazas)
- 200 ml de leche tibia (¾ taza + 2 cucharadas, puedes usar leche vegetal)
- 150 g de azúcar (¾ taza)
- 3 huevos
- 100 ml de aceite neutro (½ taza, como aceite de girasol o canola)
- 25 g de levadura fresca (o 10 g de levadura seca)
- Esencia de vainilla (1-2 cucharaditas, al gusto)
- Para el relleno y decoración:
- Crema de chocolate casera (al gusto, aproximadamente 200 g)
- Almendras picadas y enteras (al gusto, aproximadamente 50 g)
- 1 huevo batido (para pintar)
Pongo todo en mi mesa y siento que estoy por armar algo increíble. Con esto salen 8-10 porciones—perfectas para compartir o devorar sola si me pongo golosa. Es mi lista de oro para una rosca sana y rica. Siempre reviso que tenga todo antes de arrancar—mi truco para no correr a última hora. ¿Qué peor que darte cuenta que te falta levadura a medio camino? Así me mantengo relajada y lista.
Instructions
Paso 1: Prepara el Fermento
¡Empecemos con magia!—en un bol pequeño, disuelve 25 g de levadura fresca en 50 ml de leche tibia (de los 200 ml) con 1 cucharada de azúcar (de los 150 g) (me encanta ese burbujeo!). Tapa con film plástico—deja reposar 10 minutos en un lugar cálido ‘til que espume (mi cocina huele a levadura y me hace saltar!). Si usas 10 g de levadura seca, espera al siguiente paso—es como despertar la vida (mi corazón late con ilusión!).
Paso 2: Mezcla los Secos y Húmedos
En un bol grande, vierte 500 g de harina de avena—haz un hueco (me emociono con esa montaña!). Añade 3 huevos, 150 g de azúcar menos la cucharada, 1-2 cucharaditas de esencia de vainilla, 100 ml de aceite neutro, el resto de la leche tibia (150 ml) y el fermento espumoso (mi cocina huele a vainilla y me hace soñar!). Mezcla con una espátula o las manos—es como crear una masa viva (mi corazón late con cada revuelo!). Es el alma esponjosa—pura base saludable.
Paso 3: Amasa la Masa
Pasa la masa a una superficie enharinada con avena—amasa 5-7 minutos ‘til que sea suave y elástica (me encanta esa textura pegajosa!). Coloca en un bol—tapa con un paño y deja levar 1-1.5 horas en un lugar cálido ‘til que doble (mi paciencia crece!). Es como darle un abrazo—pura magia leudante.
Paso 4: Forma la Rosca
Desgasifica la masa—divide en 2 tiras largas (me siento pro trenzando!). Trenza y une los extremos—coloca en una placa enmantecada con un aro en el centro (mi corazón late con cada giro!). Es la parte divertida—pura artesanía casera.
Paso 5: Deja Levar
Cubre con un paño—deja levar 30-45 minutos ‘til que casi doble (me emociono con ese crecimiento!). Es como esperar un regalo—pura textura esponjosa.
Paso 6: Hornea la Rosca
Precalienta el horno a 180°C (350°F)—pinta con 1 huevo batido (me encanta ese brillo!). Hornea 30-35 minutos—pincha con un palillo ‘til que salga limpio (mi cocina huele a Pascua!). Cubre con aluminio si dora rápido—enfría en la placa (te juro que vas a suspirar como yo la primera vez!). Es pura delicia cocida—lista para brillar (yo miro ansiosa por la ventanita!).
Paso 7: Rellena, Decora y Sirve
Corta por la mitad—rellena con 200 g de crema de chocolate casera (me emociono con esa capa!). Extiende más crema encima—decora con 50 g de almendras (mi cocina es una fiesta!). Corta en 8-10 porciones—sirve con café, té o mate (en mi casa no dura mucho!). Disfruta a temperatura ambiente—pura felicidad casera (mi mesa está lista!). Es saludable e indulgente—un festejo en cada bocado.
Resumen de la Receta y Preguntas Frecuentes
Esta Rosca de Pascua sin Manteca con Avena, Almendras y Chocolate es mi orgullo: esponjosa, nutritiva, horneada a 180°C por 35 minutos—la hago en pasos—fermento, amaso, trenzo, horneo—y es el sueño de cualquier amante de lo casero y sano. Es mi joya casera favorita. ¿Puedo hacerla antes? Sí, la preparo y la guardo en un táper 2-3 días—me encanta tenerla lista para antojos rápidos. ¿Y si no tengo almendras? Uso nueces—queda igual de rico—no hay excusa para no hacerla. ¿Por qué no sube? Quizá la levadura falló—pruebo otra la próxima—con práctica, sale perfecta y me siento pro.