Paso 1: Preparando el primer relleno

Comienza salpimentando los muslos de pollo deshuesados. Para el primer relleno, coloca una loncha de jamón york y una loncha de queso en cada muslo, luego enrolla el muslo sobre sí mismo, asegurándote de que el relleno quede bien dentro. Ata el muslo con una malla para carne o con hilo de cocina para que no se abra durante la cocción.

Paso 2: Preparando el segundo relleno

Para el segundo relleno, haz lo mismo que en el paso anterior, pero esta vez usa una loncha de bacon y unos dátiles sin hueso. Enrolla el muslo de la misma forma y átalo bien para que el relleno quede sellado.

Paso 3: Preparando el tercer relleno

Para el tercer relleno, bate dos huevos en un bol y añade una picada de ajo y perejil. Cuaja la mezcla en una sartén como si fuera una tortilla. Luego, salpimenta los muslos y extiende una capa de carne picada sobre cada muslo. Encima de la carne, coloca la tortilla de ajo y perejil. Vuelve a enrollar el muslo y átalo bien.

Paso 4: Horneando los muslos

Una vez que todos los muslos estén rellenos y atados, colócalos en una bandeja para horno. Añade a la bandeja las zanahorias, tomates, cebollitas y ciruelas. Con el horno precalentado a 180ºC, hornea los muslos durante 30 minutos. Después de este tiempo, da la vuelta a los muslos y hornea otros 30 minutos más, regándolos de vez en cuando con el jugo que vayan soltando.

Paso 5: Preparando la salsa

Cuando los muslos estén listos, sácalos del horno y colócalos en una fuente. Los ingredientes restantes de la bandeja (zanahorias, tomates, cebollas y ciruelas) pásalos a un vaso de batidora y bátelos bien. Después, cuela la salsa para que quede más fina y suave.

Paso 6: Servir

Sirve los muslos rellenos con la salsa por encima o a un lado. Puedes acompañarlos de arroz, puré de patatas o una ensalada fresca.