Ingredients
-
- 1 masa para tarta (quebrada, brisa o hojaldre)
-
- 300 g de espinacas frescas
-
- 200 g de queso rallado (gruyère, cheddar, emmental o mezcla)
-
- 3 huevos
-
- 200 ml de nata líquida
-
- 1 cebolla pequeña, picada
-
- 2 dientes de ajo, picados
-
- Sal y pimienta al gusto
-
- ½ cucharadita de nuez moscada (opcional)
Instructions
Empiezo precalentando el horno a 180°C y extendiendo 1 masa para tarta en un molde—pincho la base con un tenedor y la horneo 10 minutos para que quede crujiente. En una sartén, sofrío 1 cebolla picada y 2 dientes de ajo con aceite hasta que están dorados—el aroma me emociona. Añado 300 g de espinacas frescas y cocino hasta que se ablandan—verde y listo.
En un bol, bato 3 huevos con 200 ml de nata, echo 200 g de queso rallado, sal, pimienta y ½ cucharadita de nuez moscada—mezclo hasta que está suave. Coloco las espinacas salteadas sobre la masa prehorneada y vierto la mezcla de huevos—queda perfecta y uniforme. Lo horneo 30-35 minutos, hasta que está firme y dorado—verlo crecer es mi alegría.
Lo dejo enfriar unos minutos antes de cortarlo—paciencia aquí vale la pena. Luego lo sirvo—caliente o tibio, es pura delicia. Cada porción es un pedacito de felicidad casera.