Ingredientes principales:
- 130 g de semillas de sésamo (1 taza): Aportan calcio, magnesio y un sabor tostado característico
- 130 g de semillas de calabaza (1 taza): Ricas en zinc, hierro y proteínas vegetales de alta calidad
- 140 g de plátano maduro triturado (½ taza + 1 cda): Funciona como endulzante natural y aglutinante
- 1 pizca de sal: Realza todos los sabores y equilibra el dulzor natural
¿Por Qué Estos Ingredientes Funcionan Tan Bien?
Las semillas de sésamo contienen lignanos y grasas monoinsaturadas que benefician la salud cardiovascular. Además, su textura pequeña permite una distribución uniforme en cada galleta. Si no tienes semillas de sésamo, puedes sustituirlas por semillas de girasol tostadas o almendras picadas finamente.
Las semillas de calabaza, también conocidas como pepitas, son verdaderas joyas nutricionales. Contienen triptófano, que ayuda a mejorar el estado de ánimo, y magnesio para la función muscular. Como alternativa, las semillas de girasol o nueces picadas funcionan perfectamente.
El plátano maduro es fundamental porque su alto contenido de azúcares naturales permite que las galletas se mantengan unidas sin necesidad de huevos ni harinas. Debe estar bien maduro (con manchas marrones) para obtener la dulzura y consistencia adecuadas. Si prefieres menos dulzor, puedes sustituir parte del plátano por puré de calabaza cocida.
Instrucciones Paso a Paso: Técnica Perfecta
1. Preparación de ingredientes (5 minutos)
Precalienta el horno a 180°C y coloca la rejilla en la posición baja. Tritura completamente el plátano maduro con un tenedor hasta obtener un puré sin grumos. Mide las semillas y tenlas listas en recipientes separados.
Tip profesional: Si el plátano no está lo suficientemente maduro, puedes hornearlo 10 minutos antes de triturarlo para concentrar sus azúcares naturales.
2. Mezcla de ingredientes (3 minutos)
En un bol mediano, combina las semillas de sésamo y calabaza. Añade el plátano triturado y la pizca de sal. Mezcla con una cuchara de madera hasta que todos los ingredientes estén completamente integrados.
Consejo importante: La mezcla debe quedar húmeda pero no líquida. Si está muy seca, añade una cucharada más de plátano triturado.
3. Formado de galletas (5 minutos)
Cubre una bandeja para horno con papel vegetal. Con una cuchara sopera, toma porciones de la mezcla y colócalas en la bandeja, dejando 3 cm de separación entre cada una. Aplana ligeramente cada porción con el dorso de la cuchara para formar discos de aproximadamente 1 cm de grosor.
Técnica especial: Presiona suavemente los bordes hacia el centro para evitar que se desmoronen durante el horneado.
4. Horneado perfecto (15-20 minutos)
Hornea en la rejilla baja durante 15-20 minutos, hasta que los bordes estén dorados y el centro se vea firme. No las muevas durante los primeros 10 minutos para que mantengan su forma.
Indicador visual: Las galletas están listas cuando tienen un color dorado uniforme y suenan ligeramente huecas al tocarlas con una cuchara.
5. Enfriado crucial (10 minutos)
Retira del horno y deja enfriar completamente sobre la bandeja antes de manipularlas. Durante este tiempo, las galletas terminarán de endurecerse y desarrollarán su textura crujiente característica.
Montaje y Presentación: El Toque Final
Las galletas crujientes de sésamo y calabaza no requieren montaje complejo, pero sí algunos detalles que marcan la diferencia. Una vez completamente frías, transfiérelas cuidadosamente a un plato de presentación.
Para una presentación elegante, espolvorea ligeramente con semillas de sésamo tostadas adicionales o un toque de canela en polvo. Si las vas a servir como postre, acompáñalas con té verde o café negro para contrastar con su dulzor natural.
Ideas de presentación:
- En una cesta de mimbre forrada con papel pergamino para un toque rústico
- Apiladas en un frasco de vidrio transparente como regalo casero
- Sobre una tabla de madera con frutos secos adicionales

Galletas Crujientes de Sésamo y Calabaza: 3 Ingredientes, 100% Naturales y Deliciosas
- Total Time: 30 minutos
- Yield: 12 galletas pequeñas 1x
- Diet: Gluten Free
Description
Galletas crujientes y saludables hechas con solo tres ingredientes naturales: semillas de sésamo, calabaza y plátano. Sin gluten, sin azúcar añadida y perfectas para picar.
Ingredients
- 130 g de semillas de sésamo (1 taza)
- 130 g de semillas de calabaza (1 taza)
- 140 g de plátano maduro triturado (½ taza + 1 cucharada)
- 1 pizca de sal
Instructions
- En un bol, mezcla las semillas de sésamo, las semillas de calabaza y el plátano triturado. Añade una pizca de sal y mezcla hasta integrar por completo.
- Cubre una bandeja con papel vegetal y reparte cucharadas de la mezcla, formando galletas. Aplánalas ligeramente.
- Hornea en horno precalentado a 180 °C durante 15 a 20 minutos, en la rejilla baja, hasta que estén doradas.
- Retira del horno y deja enfriar por completo antes de manipularlas. Al enfriarse, se vuelven más crujientes.
Notes
- Si deseas un toque más dulce, puedes agregar canela o pasas picadas.
- Conserva en un recipiente hermético hasta por 5 días.
- Usa plátanos bien maduros para mejor textura y dulzor.
- Prep Time: 10 minutos
- Cook Time: 20 minutos
- Category: Galletas saludables
- Method: Horneado
- Cuisine: Internacional
Nutrition
- Serving Size: 1 galleta
- Calories: 95
- Sugar: 2g
- Sodium: 15mg
- Fat: 7g
- Saturated Fat: 1g
- Unsaturated Fat: 5g
- Trans Fat: 0g
- Carbohydrates: 6g
- Fiber: 2g
- Protein: 3g
- Cholesterol: 0mg
Keywords: galletas saludables, galletas sin gluten, galletas con plátano, galletas de semillas, snacks naturales
Conservación y Preparación Anticipada
Las galletas crujientes de sésamo y calabaza mantienen su textura perfecta durante varios días si se almacenan correctamente. Guárdalas en un recipiente hermético a temperatura ambiente hasta por 5 días. La humedad es su principal enemigo, así que asegúrate de que estén completamente frías antes de almacenarlas.
Para preparación anticipada, puedes formar las galletas y refrigerarlas hasta 24 horas antes de hornear. También es posible duplicar la receta y congelar la mitad de la masa en porciones individuales. Se mantienen congeladas hasta 3 meses.
Consejo de almacenamiento: Coloca papel pergamino entre las capas de galletas para evitar que se peguen. Si pierden crujiente, puedes tostarlas ligeramente en el horno a 150°C durante 3-5 minutos.
Para conservar su frescura, mantén el recipiente en un lugar fresco y seco, lejos de la luz directa del sol. No las refrigeres, ya que la humedad del refrigerador puede ablandarlas.
Variaciones Creativas: Explora Nuevos Sabores
Variación Especiada Mediterránea
Añade una cucharadita de canela molida y media cucharadita de jengibre en polvo a la mezcla base. Esta combinación aporta calidez y un toque exótico que recuerda a las especias del Mediterráneo oriental. Puedes incluir también ralladura de naranja para un aroma cítrico sutil.
Versión Tropical con Coco
Sustituye 30g de semillas por coco rallado sin azúcar y añade una cucharadita de extracto de vainilla. El resultado es una galleta con sabores tropicales que transporta directamente a las playas del Caribe. Esta variación es especialmente popular entre los niños.
Galletas Proteicas con Quinoa
Incorpora 2 cucharadas de quinoa hinchada para aumentar el contenido proteico y añadir una textura más crujiente. Esta versión es ideal para deportistas o quienes buscan un snack más nutritivo después del ejercicio. La quinoa aporta aminoácidos esenciales que complementan perfectamente las proteínas de las semillas.
Adaptación Sin Frutos Secos
Para personas con alergias, sustituye las semillas por copos de avena tostados y semillas de chía. Aunque cambia ligeramente la textura, mantiene el perfil nutricional y el sabor satisfactorio. Esta versión también es más económica y accesible.
Cada variación mantiene la base de tres ingredientes principales, simplemente incorporando elementos adicionales que enriquecen la experiencia gustativa sin complicar la preparación.
Conclusión: Tu Nueva Receta Favorita
Las galletas crujientes de sésamo y calabaza demuestran que la simplicidad puede ser extraordinaria. Con solo tres ingredientes naturales, has descubierto una forma deliciosa de satisfacer antojos mientras nutres tu cuerpo.
Estas galletas representan mucho más que un simple snack. Son la prueba de que comer saludable no significa renunciar al placer. Además, su versatilidad permite adaptarlas a diferentes gustos y necesidades dietéticas sin perder su esencia.
Te animo a experimentar con las variaciones propuestas y a crear tus propias versiones. La cocina saludable se trata de encontrar ese equilibrio perfecto entre sabor, nutrición y practicidad. ¿Qué esperas para preparar tu primera tanda?
Comparte tus resultados en los comentarios y cuéntanos qué variación te gustó más. La comunidad de cocina saludable siempre está dispuesta a aprender nuevos trucos y celebrar los éxitos culinarios de todos.
Preguntas Frecuentes
¿Puedo hacer estas galletas sin plátano?
Sí, puedes sustituir el plátano por puré de calabaza cocida, puré de manzana sin azúcar o pasta de dátiles. Sin embargo, el plátano maduro proporciona la consistencia y dulzor ideal, por lo que otras alternativas pueden requerir ajustes en las cantidades.
¿Las galletas quedan realmente crujientes?
Absolutamente. El secreto está en el horneado completo y el enfriado adecuado. Las galletas deben verse doradas y sonar ligeramente huecas al tocarlas. El enfriado completo es crucial para desarrollar la textura crujiente característica.
¿Cuánto tiempo duran estas galletas?
Almacenadas correctamente en un recipiente hermético, las galletas mantienen su frescura y crujiente hasta 5 días a temperatura ambiente. Si vives en un clima muy húmedo, es recomendable consumirlas en 3 días.
¿Puedo añadir chocolate o chips?
Por supuesto. Puedes incorporar chips de chocolate negro (sin azúcar), pasas, arándanos secos o trozos pequeños de frutos secos. Añade estos ingredientes en pequeñas cantidades (1-2 cucharadas) para mantener la integridad de la receta base.
¿Son aptas para niños pequeños?
Sí, estas galletas son ideales para niños mayores de 2 años. Las semillas aportan nutrientes esenciales para el crecimiento, y la ausencia de azúcar refinada las convierte en una opción mucho más saludable que las galletas comerciales.