Description
Prepara esta Ensalada Templada de Pera Asada: peras caramelizadas, espinacas frescas, gorgonzola y nueces pecanas. ¡Receta fácil y deliciosa!
Ingredients
Aquí está todo lo que uso, medido con cariño:
- Para la Ensalada:
- 2 peras maduras pero firmes (Conferencia, Williams o Anjou)
- 1 cucharada (15 ml) de miel
- 1 cucharada (15 ml) de aceite de oliva virgen extra
- 1/2 cucharadita de pimienta negra recién molida
- Una pizca de sal Maldon o flor de sal (opcional)
- 4 tazas (aproximadamente 120 g) de espinacas baby frescas
- 1/2 taza (aproximadamente 75 g) de queso gorgonzola desmenuzado
- 1/3 taza (aproximadamente 40 g) de nueces pecanas, tostadas y picadas gruesas
- 1–2 cucharadas (15–30 ml) de vinagre balsámico de Módena
- Una pizca de canela en polvo (opcional)
- Unas hojas de rúcula (opcional)
- 1 cucharada extra de aceite de oliva (opcional)
- Para las Nueces Pecanas Caramelizadas (opcional):
- 1/3 taza de nueces pecanas
- 1 cucharada de azúcar moreno (o panela o miel)
- Una pizca de sal
- Una pizca de cayena en polvo (opcional)
Pongo todo en mi mesa y siento que estoy por armar algo increíble. Con esto sale una ensalada para 2-3—perfecta para compartir o disfrutar sola si me pongo celosa. Es mi lista de oro para un día especial. Siempre reviso que tenga todo antes de arrancar—mi truco para no correr a última hora. ¿Qué peor que darte cuenta que te falta gorgonzola a medio camino? Así me mantengo relajada y lista.
Instructions
Paso 1: Precalentar y Preparar
¡Empecemos con ganas!—enciende el horno a 200°C con calor arriba y abajo, y siente cómo la cocina se prepara para algo rico. Forra una bandeja con papel de hornear—yo lo pongo bien estirado para que no se pegue nada (me encanta ese truco fácil!). Respira hondo—esto va a ser una delicia, y tú ya estás en marcha.
Paso 2: Cortar las Peras
Toma 2 peras maduras pero firmes—pélalas con cuidado, córtalas por la mitad a lo largo y quita el corazón con una cucharita o descorazonador (me siento pro sacando esas semillitas!). Corta cada mitad en gajos de 1-1.5 cm—hazlo con amor para que queden bonitos (yo me como un trocito crudo porque no resisto!). Colócalos en la bandeja—ya se ven preciosas esperando su momento.
Paso 3: Aderezar las Peras
En un bol pequeño, mezcla 1 cucharada de miel, 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra, 1/2 cucharadita de pimienta negra recién molida y una pizca de sal Maldon (yo a veces echo canela para un toque extra!). Rocía esta mezcla sobre los gajos de pera—usa las manos o una brocha para cubrirlos bien (me encanta ver cómo brillan con la miel!). Asegúrate que cada pedazo esté feliz y listo para caramelizarse.
Paso 4: Asar las Peras
Mete la bandeja al horno por 15-20 minutos—vigila hasta que estén tiernas, doradas y con ese borde caramelizado (mi cocina se llena de un aroma dulce que me hace saltar!). Gira las peras a la mitad si tu horno no calienta parejo—yo miro por la ventanita como niña ansiosa. Sácalas cuando estén perfectas—no te pases, que no se quemen (¡ese dorado es pura magia!).
Paso 5: Caramelizar las Nueces (Opcional)
Mientras las peras se asan, toma una sartén pequeña—echa 1/3 taza de nueces pecanas, 1 cucharada de azúcar moreno, una pizca de sal y una pizca de cayena si te animas (me siento atrevida con ese toque picante!). Cocina a fuego medio, removiendo sin parar, hasta que el azúcar se derrita y cubra las nueces—tarda 2-3 minutos (yo canto mientras las muevo para no quemarlas!). Extiéndelas en papel de hornear para que enfríen—pícalas gruesas cuando estén duras (¡ese crujido me tiene loca!).
Paso 6: Preparar las Espinacas
En una ensaladera grande o platos individuales, pon 4 tazas de espinacas baby frescas—lávalas y sécalas bien antes (me encanta su verde tierno y crujiente!). Si quieres, mezcla unas hojas de rúcula—yo las echo a veces por ese picantito que me gusta (me siento como chef eligiendo mis verdes!). Esta base fresca es el lienzo perfecto para lo que viene.
Paso 7: Armar la Ensalada
Saca las peras del horno—colócalas templadas sobre las espinacas, repartiéndolas con cariño (me emociono viendo cómo se asientan tan bonitas!). Espolvorea 1/2 taza de gorgonzola desmenuzado—yo lo desmigo con los dedos para que caiga como nieve (ese queso cremoso me derrite!). Añade 1/3 taza de nueces pecanas tostadas o caramelizadas—esparce ese crujido por todo el plato (¡es como un tesoro escondido!).
Paso 8: Aliñar y Servir
Justo antes de llevarla a la mesa, rocía 1-2 cucharadas de vinagre balsámico—deja que caiga como lluvia dulce sobre todo (me siento artista con ese toque oscuro!). Si quieres un aderezo clásico, mezcla el vinagre con 1 cucharada extra de aceite de oliva, sal y pimienta—yo a veces lo hago para sentirme más fancy (¡queda de lujo!). Sirve de inmediato—ese contraste templado y fresco te va a enamorar, te lo juro.