Ingredients
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			- 1 cebolleta, picada finamente
 - 1 diente de ajo, picado
 - 15 g de azúcar moreno
 - 30 g de kétchup
 - 15 g de tomate concentrado
 - 15 g de salsa Worcestershire
 - 30 g de miel
 - 10 g de pimentón dulce (o picante, según tu preferencia)
 - 15 ml de aceite de oliva virgen extra
 - Sal y pimienta al gusto
 
Instructions
1. Sofreír los ingredientes básicos
- Calienta el aceite de oliva en una sartén a fuego medio.
 - Añade la cebolleta picada, el ajo y el azúcar moreno. Cocina durante unos minutos, removiendo ocasionalmente, hasta que la mezcla comience a caramelizarse. Salpimenta ligeramente.
 
2. Incorporar los sabores principales
- Retira la sartén del fuego y añade el kétchup, el tomate concentrado, la salsa Worcestershire, la miel y el pimentón.
 
3. Mezclar y ajustar
- Mezcla bien todos los ingredientes y utiliza una batidora de mano para triturar la salsa hasta obtener una textura homogénea.
 - Prueba la salsa y ajusta la sal, la pimienta o cualquier otro ingrediente según tu gusto personal.
 
Notes
- Conservación: Guarda la salsa en un tarro hermético y refrigérala. Se conservará perfectamente durante una semana.
 - Ajusta el picante: Si prefieres un toque más atrevido, sustituye el pimentón dulce por pimentón picante, añade una pizca de chile en polvo, sriracha o un poco de harissa.
 - Versatilidad: Úsala para costillas, muslitos de pollo, hamburguesas o incluso como salsa para dipear con patatas fritas o nuggets.