Ingredients
Scale
- 200 g de espinacas frescas
- Zumo de medio limón
- 3 huevos
- 220 g de harina de repostería (especial para bizcochos)
- 180 g de azúcar
- 85 g de leche
- 75 g de aceite de oliva virgen extra suave (o aceite de girasol)
- 1 sobre de levadura en polvo (si la harina no es especial para bizcochos)
Para la cobertura:
- 300 g de queso crema
- 50–200 g de azúcar glas (ajusta al gusto)
- Nueces (opcional, para decorar)
Instructions
- Preparar las espinacas: Lava bien las espinacas frescas y colócalas en una cacerola. Rocíalas con el zumo de medio limón y cocina a fuego bajo durante unos 5 minutos. No es necesario que se cocinen completamente, solo deben ablandarse un poco. Después, deja que se enfríen durante unos minutos.
- Triturar las espinacas: Una vez que las espinacas estén atemperadas, transfiérelas a otro recipiente y agrega la leche, los huevos y el aceite de oliva. Usa una batidora de mano para triturar bien las espinacas hasta obtener una mezcla homogénea, sin trozos grandes.
- Mezclar los ingredientes secos: En otro bol, mezcla la harina con la levadura (si tu harina no es especial para bizcochos) y el azúcar. Revuelve bien hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.
- Unir los ingredientes: Agrega la mezcla líquida de espinacas a los ingredientes secos y mézclalo todo con una espátula. Si tienes batidora, puedes usarla a baja velocidad, pero se recomienda hacerlo con la espátula para que el bizcocho quede más jugoso. Asegúrate de tamizar la harina para evitar que queden grumos.
- Hornear el bizcocho: Precalienta el horno a 170-180ºC y engrasa un molde rectangular. Vierte la masa en el molde y hornea durante 35-40 minutos. Si ves que se está dorando demasiado, cúbrelo con papel de aluminio para evitar que se queme. El bizcocho tiene un color verde intenso, así que no te preocupes si no se dora como un bizcocho tradicional.
- Dejar enfriar y desmoldar: Una vez cocido, retira el bizcocho del horno y deja enfriar durante unos 10 minutos antes de desmoldarlo. Luego, ponlo en una rejilla para que se enfríe completamente.
- Preparar la cobertura: Mientras el bizcocho se enfría, mezcla el queso crema con el azúcar glas en un recipiente. Usa un tenedor o una batidora para conseguir una mezcla suave y homogénea. Ajusta la cantidad de azúcar según tu gusto.
- Decorar: Cuando el bizcocho esté completamente frío, cubre la parte superior con la mezcla de queso crema. Decora con nueces por encima para darle un toque crujiente. ¡Y listo! El bizcocho dulce de espinacas está listo para servir.
Notes
- Este bizcocho tiene un sabor suave, no se nota un fuerte sabor a espinacas. La espinaca le da un color verde vibrante sin interferir demasiado en el sabor, lo que lo hace perfecto para los niños.
- Si quieres hacerlo más saludable, puedes reducir la cantidad de azúcar o usar un edulcorante natural en la cobertura.