1. Precalentar el horno:

• Precalienta el horno a 160°C (325°F). Engrasa y enharina un molde para bizcocho o cúbrelo con papel pergamino.

2. Tostar las nueces:

• Coloca las nueces picadas en una sartén a fuego medio y tuéstalas durante 5 a 7 minutos, removiendo constantemente. Sabrás que están listas cuando estén ligeramente doradas y desprendan un aroma agradable. Retíralas del fuego y deja que se enfríen.

3. Batir la mantequilla y el azúcar:

• En un bol grande, bate la mantequilla ablandada con las 2 tazas de azúcar a velocidad media durante 3-4 minutos, hasta que obtengas una mezcla suave y esponjosa.

4. Agregar los huevos y la vainilla:

• Añade los huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición. Luego, incorpora la cucharadita de extracto de vainilla y mezcla hasta que se integre completamente.

5. Mezclar los ingredientes secos:

• En un bol aparte, combina las 2 tazas de harina, el polvo para hornear y la sal. Usa un batidor manual para asegurarte de que estén bien mezclados.

6. Alternar ingredientes secos y leche:

• Añade la mezcla de harina en tres partes a la mezcla de mantequilla, alternando con la leche. Comienza y termina con la harina, mezclando suavemente después de cada adición hasta que todo esté integrado.

7. Incorporar las nueces:

• Agrega las nueces tostadas a la masa y mezcla suavemente con una espátula para distribuirlas de manera uniforme.

8. Verter en el molde y hornear:

• Vierte la masa en el molde preparado y alisa la superficie con una espátula. Hornea durante 60-70 minutos, o hasta que un palillo insertado en el centro salga limpio.

9. Dejar enfriar:

• Saca el molde del horno y deja enfriar el bizcocho durante 10-15 minutos antes de desmoldarlo. Luego, transfiérelo a una rejilla para que termine de enfriarse completamente.